miércoles, 10 de junio de 2020

SHEILA



Es una palmera en el sentido mayestatico de la palabra.

La conocí hace aproximadamente dos años.

Comenzó a trabajar junto a una compañera de puntillas .

Poco a poco dio a conocer su verdadera personalidad.

Desde el comienzo percibi que era un diamante en bruto.

Aposte por ella y no me defraudó.

Como todos los diamantes hay que pulirlos. Y en esta fase encuentras la dureza que supone hacerlo. Pero merece la pena.

Es una luchadora. Se ha hecho asimisma.

Carácter indomable ambivalente. Aunque ella misma no lo sepa con una gran sensibilidad que a veces quiere enmascarar con una coraza que evite llegar a su corazón.

Estoy plenamente convencido que según vaya quemando etapas en su trayectoria profesional logrará convertirse en una gran abogada.

Confio poder estar en ese su primer día de celebrar a un juicio, por supuesto, a muchos mas.

He procurado perceptible e imperceptiblemente dejar constancia de mi deseo que sea quien continúe al frente del despacho en la fecha que aún estando deje de estar.

Hasta entonces continuaremos discutiendo sonriendo polemizando.

Como es la vida y ella como diría el poeta haciendo camino al andar.

Gracias por tu lealtad y actitud.

Y aunque a veces cueste trabajo decirlo. Nunca dejes de ser como eres.

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